La economía social ha marcado 2025 en la Región de Murcia, un año en el que la capitalidad situó a la ciudad y a la comunidad en el centro del debate sobre modelos empresariales sostenibles, inclusivos y generadores de empleo estable. En este especial de Élite Murcia recorremos los hitos más destacados de este año a través de un reportaje visual que revive los momentos clave de la capitalidad, conversamos en profundidad con Juan Antonio Pedreño, presidente de Ucomur y la voz más influyente del cooperativismo español y europeo, y compartimos la reflexión firmada por el propio presidente de la Comunidad, Fernando López Miras, que analiza el impacto y el legado de este año excepcional. El especial se completa con una mirada al futuro a través de la nueva sede institucional de Ucomur que acogerá el Hub de Vanguardia y la Academia de Emprendimiento y un reportaje que pone el foco en los sectores emergentes de la economía social.

La designación de Murcia como capital española de la economía social este 2025 convirtió a la Región en epicentro de uno de los movimientos empresariales y sociales más importantes del continente. Para Juan Antonio Pedreño, presidente de Ucomur, CEPES y Social Economy Europe, el año ha sido “histórico, irrepetible y profundamente transformador”. 

El resultado ha superado todas las expectativas. Más de cien actividades se han desarrollado a lo largo de 2025, desde encuentros empresariales hasta conferencias, actos culturales, presentaciones de libros, jornadas educativas e incluso una carrera popular. “La unión de todas las organizaciones de la economía social de la Región ha sido ejemplar”, destaca Pedreño. 

El Premio Nobel de Economía Eric Maskin, protagonizó el acto de inauguración de Murcia como Capital Española de la Economía Social 2025 en marzo en un acto que se celebró en la Universidad de Murcia. Maskin, galardonado en 2007, fue invitado de honor en este evento que puso en valor el compromiso de la Región de Murcia con la economía social, un modelo basado en la inclusión, la sostenibilidad y la cohesión social, y contó con la presencia de autoridades como Yolanda Díaz, ministra de Trabajo y Economía Social, y el presidente de la Región de Murcia, Fernando López Miras. 

El Parlamento Europeo, en Murcia 

La semana grande, celebrada en septiembre, fue el punto culminante. Uno de los hitos más relevantes fue la celebración en Murcia del Intergrupo de Economía Social del Parlamento Europeo, algo que solo había ocurrido una vez fuera de Bruselas. “Nunca antes tantas instituciones europeas se habían reunido aquí. El Parlamento Europeo, la Comisión, Social Economy Europe, la organización estatal… Todas celebraron sus principales reuniones en Murcia”, destaca Pedreño. 

Y por primera vez, los Premios Europeos de Economía Social salieron de Bruselas y se celebraron en Murcia. “Aquí se reunieron representantes de 27 países europeos y del norte de África: Túnez, Marruecos, Argelia, Palestina, Israel… Fue impresionante”, explica Pedreño. 

Esa concentración de instituciones convirtió a la Región en un escaparate internacional del modelo cooperativo. Los datos hablan por sí solos: cerca de 650 participantes, de los cuales “más del 70% nunca había estado en Murcia y se marcharon encantados”, señala. Las actividades incluyeron un acto oficial en el Ayuntamiento, recorridos por la ciudad y una intensa agenda de trabajo. “Hemos puesto a Murcia en el mapa europeo. Eso es incuestionable”.

Además de la cumbre, la ciudad también acogió el Simposio Técnico de la Red de las Naciones Unidas para la Economía Social y Solidaria (UNTFSSE) en diciembre, lo que supuso un hito más en este rico calendario protagonizado por la economía social. 

Una escultura para la economía social 

El año dejó también huellas físicas en la ciudad, como la escultura de Cristóbal Gabarrón instalada en la plaza de Santo Domingo, símbolo de la contribución social del cooperativismo. Además, se celebraron conferencias de alto nivel y actos integradores que mostraron la diversidad del movimiento, con cooperativas musicales, artísticas o teatrales participando en los eventos. 

Pedreño cree que el impacto de la capitalidad trasciende el calendario. “Hoy, el 95% de la gente vinculada al tejido empresarial sabe que Murcia es la capital española de la economía social. Y eso era uno de los grandes objetivos: visibilidad. Lo que no se conoce no se valora”.

Con el año prácticamente cerrado, el balance es rotundo: “Hemos conseguido lo que queríamos: que Murcia fuera conocida, valorada y reconocida como un referente en economía social”, destaca. Para 2026, Ucomur ya prepara el traspaso del testigo a Mataró, próxima capital española, algo que se escenificará con un acto de relevo en el mes de enero. Pero la huella de este año quedará, como apunta Pedreño, “en la percepción de quienes han descubierto que la Región de Murcia es un territorio comprometido, acogedor y con un modelo empresarial sólido y humano”.

Pilar clave de nuestro modelo productivo, por Fernando López Miras, presidente de la Región de Murcia 

La economía social constituye uno de los pilares que mejor definen el modelo productivo de la Región de Murcia. No sólo aporta estabilidad y empleo, sino que actúa como un agente de transformación económica y social, vertebra el territorio y genera oportunidades allí donde otros modelos empresariales no llegan. 

Hoy, en la Región funcionan más de 2.500 empresas que sostienen alrededor de 100.000 empleos. Estos datos reflejan un ecosistema robusto, diversificado y consolidado en sectores estratégicos: agricultura, educación, distribución farmacéutica, economía de los cuidados, vivienda o sanidad. 

Además, este modelo empresarial ejerce un papel decisivo en ámbitos como la cohesión y el arraigo territorial, especialmente en zonas rurales amenazadas por la despoblación; la estabilidad laboral, gracias a estructuras empresariales participativas que evitan la deslocalización; la sostenibilidad, incorporando prácticas de economía circular y eficiencia de recursos; y la inclusión, a través de empresas de inserción, cooperativas de iniciativa social y centros especiales de empleo. 

En definitiva, la economía social refuerza la competitividad regional y, al mismo tiempo, garantiza que el crecimiento llegue a toda la ciudadanía. Por todo ello, la Región de Murcia ha desarrollado una política pública continuada para impulsar este modelo, algo poco común en el contexto nacional. 

Desde hace años, el Gobierno regional mantiene una alianza estable con el sector a través de los Pactos por la Economía Social. El VI Pacto, vigente en el periodo 2025-2028, supone el mayor esfuerzo presupuestario realizado hasta la fecha: más de 55 millones de euros, lo que representa un aumento del 129 % respecto al pacto anterior, con un impacto esperado de más de 6.000 nuevos empleos de calidad antes de 2028.

Este gran acuerdo, con la decisiva participación del sector, articula más de 100 medidas para visibilizar la economía social en toda la Región, impulsar la digitalización, la inteligencia artificial y la innovación empresarial. 

Va a permitir, asimismo, incrementar las ayudas a cooperativas, sociedades laborales, empresas de inserción y centros especiales de empleo, además de reforzar la formación, la intercooperación y la transición hacia modelos sostenibles.  

A este VI Pacto se suma la apuesta institucional por la Capitalidad Española de la Economía Social 2025, respaldada por el Gobierno de la Región de Murcia no sólo políticamente sino también mediante su contribución económica a la celebración de más de 150 actividades, que sitúan a Murcia en el mapa europeo del sector. 

De esta forma, la Región de Murcia tiene la oportunidad de consolidarse como el gran laboratorio nacional y europeo de este exitoso modelo económico. Para ello, contamos con un recurso fundamental, el valor añadido de nuestras cooperativas, que representan una parte fundamental del ADN económico regional y que destacan por su dinamismo.  

No en vano, la Región de Murcia es líder per cápita en creación de cooperativas en España, con 1.411 de ellas creadas en los últimos 10 años. Sólo entre 2021 y 2024, coincidiendo con nuestro V Pacto por la Economía Social, se crearon 469 nuevas cooperativas.  

Este dinamismo empresarial forma parte de la identidad de la Región. Las cooperativas murcianas lideran ámbitos como la producción agrícola, la enseñanza concertada o la distribución farmacéutica nacional.  

Su estructura participativa y su capacidad para adaptarse a las necesidades del entorno refuerzan su papel como modelo empresarial de futuro y herramienta contra las desigualdades. 

Junto a las cooperativas, otras dos familias sostienen el ecosistema de nuestra economía social, las sociedades laborales y las empresas de inserción.  

Disponemos de 625 sociedades laborales, que emplean a más de 4.500 trabajadores, haciendo de la Región de Murcia la primera comunidad autónoma en número de sociedades laborales por cada 100.000 habitantes.   

En cuanto a nuestras empresas de inserción, son 9 entidades que generan más de 340 empleos para personas en riesgo de exclusión social. Su actividad se ve reforzada por líneas de ayudas específicas, el impulso a la contratación responsable y un creciente reconocimiento institucional. 

Una prueba más de que la economía social, en sus diferentes modelos empresariales, no sólo genera riqueza y desarrollo de manera estable y arraigada; también representa una estrategia para construir un futuro para la Región de Murcia más humano, más competitivo y más sostenible.

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